A lo largo de los años, pude construir largos muros que no
me protegían de nada,
Después descubrí, que no eran tan necesarios, pues no quise
que me protegieran de ti
Demasiado tiempo pensando, demasiado tiempo tratando de
esquivar un golpe
Pero mi punto de inflexión se acaba de romper y tú no estás
aquí
Mi habitación extraña tu calor, mi cuerpo pregunta por tus
abrazos y mi cabeza le dice
que nunca debió acostumbrarse a ellos, ya no hay noches
tranquilas sin la paz de tus ojos
No lo llamaremos nuestro, fue más bien un juego en el que yo
tenía peores cartas
Ahora que ha terminado la partida, he perdido en una apuesta
a tus labios y camino sola
Persiguiendo sueños, mi corazón late al ritmo que le marcan
mis pasos, no los tuyos
Te echaré de menos, esperaré que vuelvas aunque no lo quiera
reconocer,
Te desearé en silencio, susurrando tu nombre en mi cama o
gritándolo por el balcón
Estoy casi desnuda, sólo me visten las lágrimas que fugaces
siguen las huellas de tus caricias
Pero el caos de mi vida sigue ahí, cada obsesión, las que
quedan y las que se van me empujan
Hacia alguna parte, quizás nos encontremos en el camino o nunca nos volvamos a ver
Sólo pos si acaso quería decirte que me ha gustado jugar a
tu juego y que perdería otra vez.
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